Mes: junio 2018

La importancia de las estaciones meteorológicas

Las estaciones meteorológicas no solamente nos permiten hacer un seguimiento en tiempo real, sino que son la base de datos que nos facilita cualquier tipo de información meteorológica de tiempo atrás, con lo que podemos saber cómo se ha comportado la atmósfera a partir de los registros. Pero para tener una representación lo más acercada posible a la realidad de los eventos meteorológicos que ha habido no sólo basta tener estaciones fiables, sino que debe haber una cantidad y distribución adecuada de las mismas.

El pasado 30 de mayo hubo un importante episodio de lluvias. En algunos lugares la precipitación cayó con abundancia durante muchos minutos sin parar y sin desplazarse, por lo que se alcanzaron registros desorbitados. Es el caso del municipio de Castellbell i el Vilar, donde en pocas horas se acumularon 106 litros por metro cuadrado.

Figura 1. Localización de Castellbell i el Vilar. Fuente: elaboración propia.

La localidad (resaltada en rojo) se encuentra en el sur de de la comarca del Bages, limitando al sureste con la comarca del Baix Llobregat. El municipio no cuenta con estación oficial del Servei Meteorològic de Catalunya (SMC), pero sí encontramos algunas de este organismo en los municipios cercanos. Sin embargo, basándonos en el servidor de estaciones particulares de Meteoclimatic podemos ver como hay dos en el municipio y varias más en los alrededores.

Figura 2. Ubicación de estaciones en al área de estudio. Fuente: elaboración propia.

A la izquierda se indican las seis estaciones de Meteocat más cercanas a Castellbell i el Vilar, y a la derecha las de Meteocat más las 11 de la red de Meteoclimatic. Sólo con el mapa de las estaciones de Meteocat puede parecer suficiente para considerarlas en los registros, y más teniendo en cuenta que de las seis más cercanas, tres se sitúan en municipios limítrofes.

¿Entonces cuál es el problema o inconveniente? Los 106 mm (equivale a decir litros por metro cuadrado) se produjeron y centraron en Castellbell i el Vilar, por lo que en los registros del SMC esos 106 mm no salen en ningún lado, hecho por el cual parece que haya llovido mucho menos de lo que realmente ha llovido.

Figura 3. Representación de los registros de lluvia del 30 de mayo. Fuente: elaboración propia a partir de las estaciones del Servei Meteorològic de Catalunya y Meteoclimatic consideradas en la figura 2.

A partir de los registros de todas las estaciones implicadas en esta área de estudio, he interpolado los datos de lluvia para representarlos en un mapa. Para hacernos una idea de la importancia y necesidad de tener en cuenta varias estaciones y no solamente las oficiales, se muestra una comparativa. A la izquierda se muestran los resultados de lluvia sólo teniendo en cuenta las estaciones de Meteocat, mientras que a la derecha se ha realizado el mismo procedimiento teniendo en cuenta las de Meteocat y Meteoclimatic a la vez.

Como se puede apreciar, si solamente hacemos caso a la información del SMC, en Castellbell i el Vilar se registraron algo menos de 30 mm, pero si añadimos las estaciones de Meteoclimatic los acumulados mostrados superan los 100  mm, por lo que en este caso la información es más precisa y se ajusta mucho más a la realidad.

Tabla 1. Principales registros del 30 de mayo en el área de estudio. Fuente: elaboración propia a partir de las estaciones del Servei Meteorològic de Catalunya y Meteoclimatic.

En la presente tabla se exponen las cinco estaciones de la zona con mayores registros de lluvia el 30 de mayo, de las que tres son de Meteoclimatic, nada que ver con los registros obtenidos si solamente se tienen en cuenta los del SMC.

Y ahora bien, ¿son fiables las estaciones particulares? Evidentemente hay estaciones y estaciones, la calidad de las mismas dependerá de la marca, modelo, ubicación, disponibilidad, rendimiento y colocación de los sensores, serie continuada de datos, transmisión de los mismos y mantenimiento por parte de la persona responsable; y esto ocurre con las oficiales y la particulares. Partiendo de la premisa que la estaciones oficiales son de calidad porque ofrecen un servicio público y pertenecen a un organismo oficial, la mejor manera de comprobar la fiabilidad de las privadas es comparar los datos con la estación oficial más cercana y ver las tendencias, como por ejemplo en el caso de las temperaturas. Respecto a la pluviometría, es más sencillo, puesto que varias estaciones particulares cuentan con pluviómetros homologados y no es tan necesaria la comprobación, además, para complementar, en muchos casos se dispone de pluviómetros manuales para corregir y calibrar los datos de la estación si fuera necesario.

Las otras Geografías

Más allá de lo que conocemos y entendemos por la Geografía en si misma (Geografía Científica), existe una variedad de corrientes derivadas en otras percepciones, ideas y, por tanto, en otros conceptos y tipos de Geografía.

Geografía Individual: también conocida como Geografía Subjetiva, es aquella caracterizada por el razonamiento subjetivo, es decir, es la Geografía de cada uno. Dentro de ella encontramos lo que se denomina el hombre geográfico, que es aquél que aplica su experiencia y técnicas en el entorno donde se encuentra.

Ejemplo: la planificación de un trayecto analizando aspectos básicos como el tipo de transporte a utilizar, trayecto, combinación, duración y atajos.

Geografía Popular: a diferencia de la anterior, ésta se rige por la perspectiva colectiva y no individual. Hay una grandísima diversidad.

Ejemplo: festividad de San Juan, que se celebra coincidiendo con el solsticio de verano.

Geografía Mitológica: es la que trata de comprender y aplicar la incidencia del universo hacia el ser humano, pero no desde una óptica científica, sino desde el punto de vista de la creencia no técnica, como la Astrología. La Geografía Mitológica trata, pues, de explicar el funcionamiento del mundo a partir de los seres sobrenaturales, que son los que, a la vista de los implicados en esta corriente, mantienen el mundo.

Ejemplo: la alineación de los planetas incide en la suerte de las personas.

Geografía Legendaria: consiste en el relato de viajes donde se mezclan los aspectos reales e imaginarios.

Ejemplo: los griegos consideraban que viajar al Hemisferio Sur implicaba ser carbonizado por el Sol.

Geografía Imaginaria: similar a la anterior, pero todo es ficticio. Se basa en la trasposición de elementos naturales a marcos sobrenaturales o marcos que no existen.

Ejemplo: existen los osos polares, pero siempre se ha hablado, además, del hombre de las nieves, el Yeti, que habita en zonas nivosas de montaña y suele ser objeto de mitos y cuentos.

Geografía Críptica: parte de la premisa de que hay influencia de fuerzas no observables que actúan sobre la Tierra y el ser humano. Estas fuerzas proceden del interior de la Tierra y de los Astros.

Ejemplo: movimientos de tierra débiles e imperceptibles para el hombre que paulatinamente dejan fisuras en la superficie. Ayer no estaban y hoy sí.

Geografía Leutérica: comporta la adoración de ciertos elementos naturales que presentan unos rasgos muy particulares.

Ejemplo: el agua, ese líquido transparente y sin sabor, es el elemento natural más preciado. Sin agua, no hay vida.

El listado es una clara muestra de la amplitud y transversalidad que adquiere la Geografía, aunque algunos de los presentes casos se fundamenten en hechos acientíficos, sin rigor técnico y de los que desde mi punto de vista personal no presentan ninguna credibilidad.