Mes: diciembre 2015

La tendencia de los huracanes del Atlántico en los últimos años

El pasado 30 de noviembre finalizó oficialmente el período de huracanes en el Atlántico. Para conocer mejor qué son y sus características podéis echar un vistazo al post sobre los huracanes de este mismo blog: Los huracanes.

Partiendo del análisis de los datos, en las últimas décadas ha habido un ligero aumento de la tendencia en cuanto al número de huracanes en el Atlántico. Una circunstancia que favorece a este aumento es el incremento de la temperatura media del agua superficial del océano Atlántico.

Grafico_huracanes.jpg
Figura 1. Huracanes en el Atlántico durante el período 1910-2015. Fuente: National Hurricane Center.

Es importante tener en cuenta tres aspectos. El primero de ellos es la dinámica de la propia tendencia; aunque ésta sea ligeramente al alza no hay un patrón fijo, es decir, el número de huracanes en el Atlántico va variando año tras año. Si bien en 2011 hubo siete huracanes en el Atlántico, en 2012 hubo 10, pero en 2013 la cifra bajó, habiendo sólo dos huracanes, y en 2014 volvió a subir la cifra, siendo de seis huracanes. Y sin embargo, para este 2015 sólo se han registrado cuatro huracanes. Pero si tomamos como referencia períodos largos podemos destacar que entre 1910 y 1960 hubo en el Atlántico 246 huracanes, mientras que de 1961 hasta 2015 ha habido 346 huracanes, 100 más respecto al anterior período. Además, entre 1995 y 2015 se han registrado 157 huracanes, es decir, en las últimas dos décadas se han producido el 26% del total de huracanes habidos en 115 años. Por lo tanto, aunque la cifra de huracanes vaya aumentando y disminuyendo año tras año, la tendencia general muestra un incremento de éstos, discreto en los últimos años pero destacado si tomamos en consideración las últimas décadas.

El segundo aspecto a tener en cuenta es la magnitud de los huracanes en las últimas décadas. Si bien éstos han aumentado, habría que observar si también ha incrementado su intensidad. Como ya se indicó en el post de los huracanes, los que presentan vientos sostenidos entre 119 y 177 km/h son de categoría 1 y 2, mientras que los que presentan intensidades superiores a los 178 km/h son de categoría 3, 4, 5, considerados huracanes de categoría superior.

Distribucion_magnitud.jpg
Figura 2. Categoría de huracanes durante el período 1910-2015. Fuente: National Hurricane Center.

De los 602 huracanes que ha habido en el Atlántico desde 1910 hasta 2015, el 41% han sido de categoría superior (de 3 a 5). En los últimos 20 años, de los 157 huracanes registrados, el 45,2% fueron de categoría superior. Por lo tanto, la tendencia en cuanto a huracanes de categoría 3 a 5, ha aumentado muy ligeramente.

Por último, hay que considerar los huracanes que alcanzan altas latitudes, favorecidos por el incremento de la temperatura superficial del océano en áreas más septentrionales más allá del Caribe. El hecho que haya huracanes en latitudes menos habituales supone un aumento en el riesgo de daños que se puedan ocasionar, ya que son zonas poco acostumbradas a estos fenómenos y, por lo tanto, no hay una buena concienciación y preparación por parte de la población y del territorio en conjunto.

Hay ejemplos recientes de huracanes que han llegado a altas latitudes, como el huracán Sandy, que en 2012 llegó a New York. Para poder analizar mejor este aspecto se ha tomado como referencia la latitud 35º Norte.

Mapa_latitud.jpg
Figura 3. Latitud de referencia sobre la trayectoria de los huracanes. Fuente: National Oceanic and Atmospheric Administration.

Durante el período 1910-2015, de los 602 huracanes que ha habido, 277 superaron los 35º N de latitud, suponiendo el 46% del total de huracanes habidos. Esto indica que en casi la mitad de las ocasiones los huracanes presentan trayectorias que van más allá del Caribe y del Golfo de Méjico. No obstante, de estos 277 huracanes que han llegado más allá de los 35º N de latitud, tan sólo el 15% eran de categoría superior, frente al 85% que eran de categoría 1 y 2. Desde 1980 hasta la actualidad, ha aumentado ligeramente el número de huracanes de categoría inferior y superior que han superado los 35º N de latitud, y algunos de ellos han llegado a zonas de New York y Canadá, tal y como se ha ejemplificado antes. El problema reside en que aumente la frecuencia de estos huracanes en esas latitudes tan altas, ya que al ser áreas de elevada densidad de población, alta actividad económica y de gran concentración de infraestructuras de transporte, hacen de estos lugares áreas altamente vulnerables ante la llegada y paso de un huracán.

Con todo ello, se puede argumentar que ha habido una ligera tendencia al aumento de huracanes en el Atlántico en los últimos años, de igual forma que ha habido un ligero incremento en cuanto a huracanes de categoría superior, y también considerar el leve aumento de huracanes que llegan a latitudes muy altas favorecidos por el calentamiento superficial del agua en lugares que históricamente presentaban temperaturas marinas más bajas. De cara a los próximos años será interesante, y a la vez importante, ver si estas tendencias siguen su curso o hay un cambio en ellas, es decir, si habrá menos o más huracanes, si serán más o menos potentes y si llegarán o no con más frecuencia a latitudes altas.

Fuentes de información: